"POR DONDE SE VA A LA DESPENSA"

Santa Fé y Bulnes. El noticiero titulaba “La inocencia interrumpida” y un subtítulo: “El niño que divide a la sociedad”. El pibito de no mas de 13 años argumentaba bien: “Por favor no me agarre, con todo el derecho que yo tengo le pido que no me agarre, si yo a la chica no le alcancé a robar nada. No tengo a mi papá acá, están en Entre Ríos”.

Un policía lo bancó: “Vos estás conmigo, tranquilizate, no te vas a ir con nadie, te quedás conmigo”. El pibe seguía argumentando, conocía la calle y el delito, sin duda.
Y luego la cámara se posó en la gente y fueron unos cuantos los que propusieron, casi como una salida inevitable y con cara de compungidos: “Yo creo que debieran internarlo en un reformatorio”.

Es decir, invisibilizarlo, que no esté acá, que no exista, que no afee esa arteria “plástica” de Buenos Aires.
-“Es un chico, pero intentó robar allá enfrente”, disparó una comerciante frente a las cámaras.
- “Tiene razón la señora, señaló una mujer con aspecto de buen pasar. Es chico, pero es un sinverguenza”

Cuando volvió la imagen al estudio, una superproducida Mónica Gutierrez, sostuvo: ¿Qué hacemos con esta situación? ¿Quién se hace cargo?.Al lado Guillermo Andino prestaba su rostro aniñado en los rasgos, aunque como maquillaje de un medievalismo extremo en su pensamiento.

Respuesta: Toda la sociedad debe hacer, nadie escapará de esta realidad , habrá responsabilidades mayores, pero es toda la sociedad la que debe hacerse cargo de lo que “supimos conseguir” durante muchos años, especialmente en la primavera neoliberal de los 90. Cuánto antes nos demos cuenta, mas oportunidades tendremos de integrar a los excluidos, pero al ver esas imágenes, sentí que en cualquier barriada pobre del conurbano hay mas capacidad de comprensión de este realidad dolorosa que en Santa Fé y Bulnes.

Y los medios de comunicación masiva, debieran proponer algo más que lo que muestran, debieran ayudar para que el fenómeno se comprenda, porque no hay solución posible si no reconocemos las causas del problema y eso no se logra con un histérico: “Alguien tiene que hacer algo”. No es el "chico que divide a la sociedad" es el que LA INTERROGA y al hacerlo, encuentra quienes comprenden y también quienes lo condenan para siempre.

Sin vincular pobreza con delincuencia, no puedo evitar acompañar el post con JUAN MANUEL SERRAT Y “DISCULPE EL SEÑOR”

Disculpe el señor,
si le interrumpo, pero en el recibidor
hay un par de pobres que
preguntan insistentemente por usted

No piden limosnas, no…
Ni venden alfombras de lana,
tampoco elefantes de ébano.
Son pobres que no tienen nada de nada.

No entendí muy bien
sin nada que vender o nada que perder,
pero por lo que parece
tiene usted alguna cosa que les pertenece.

¿Quiere que les diga que el señor salió…?
¿Qué vuelvan mañana, en horas de visita…?
¿O mejor les digo como el señor dice:
“Santa Rita, Rita, Rita,
lo que se da no se quita…?

Disculpe el señor,
se nos llenó de pobres el recibidor
y no paran de llegar,
desde la retarguardia, por tierra y por mar.

Y como el señor dice que salió
y tratándose de una urgencia,
me han pedido que les indique yo
por dónde se va a la despensa

Y que Dios, se lo pagará.
¿Me da las llaves o los echo? Usted verá
que mientras estamos hablando
llegan más y mas pobres y siguen llegando

¿Quiere usted que me llame a un guardia y que revise
Si tienen en regla sus papeles de pobre…?
¿O mejor les digo como el señor dice:
“Bien me quieres, bien te quiero,
No me toques el dinero…?

Disculpe el señor
pero este asunto va de mal en peor
vienen a millones y
curiosamente, vienen todos hacia aquí.

Traté de contenerlos pero ya ve,
han dado con su paradero.
Estos son los pobres de los que le hablé…
le dejo con los caballeros

Y entiéndase usted…
Si no manda otra cosa, me retiraré
si me necesita, llame…
Que Dios le inspire o que Dios le ampare,
Que esos no se han enterado
Que Carlos Marx está muerto y enterrado.