HUGO MEDRANO: GENETICA Y VERDAD

El mail recibido ayer circuló casi intimamente:

“Queridos amigos, queridos compañeros, querida familia de sangre y por adopción (saben a quienes me refiero) estoy cerrando una historia familiar (una parte de mi historia) y ya sabrán por el asunto, a que historia me estoy refiriendo.
No voy a entrar en detalles porque no tengo en este momento, muchas ganas de hacerlo.

El viernes me notifiqué de la Resolución Judicial en la que se declara que los restos encontrados en el Cementerio Municipal de Avellaneda pertenecen a mi hermano Hugo por corresponderse en un 99,998% en el confronte genético con mi muestra sanguínea.

Pido disculpas a aquellos a los cuales no participé en el momento en que el Equipo de Antropología Forense me anticipó la gran novedad en el mes de Noviembre. No lo hice porque tenía el pedido expreso de que la noticia no debía filtrarse hasta la obtención de la Resolución del Tribunal. Perdón. Espero sepan comprender.

En unos días nos entregarán los restos para ser inhumados en el cementerio de La Plata. Avisaré la fecha para los que puedan estar.
Seguirán las tareas para acercarnos a la verdad sobre su desaparición y su muerte, así como la de tantos seres queridos.

De la gran opresión en el pecho y el vacío en el corazón que he llevado durante 33 años ha quedado sólo el vacío en el corazón.
Siento que todos los que lo queremos somos privilegiados por lo que ha sucedido.
Nuevamente digo que dejó de ser un desaparecido para ser un asesinado y quienes lo secuestraron, son clara e irrefutablemente CRIMINALES.

No he podido plasmar lo que siento pero todos lo saben
Un gran abrazo de oso.

Marta."

Ella es Marta Medrano, hermana de Hugo, continuadora de la lucha de su madre ,ya fallecida sin saber la verdad sobre su hijo. Entrevistada hace ya unos 3 años, Marta sostuvo con mucha humildad que “mi esfuerzo parece empequeñecer al lado del de mamá, ella fue quien hizo la mayoría, por no decir todo”.
En realidad fue, junto con su sobrina Paula (hija de la pareja desaparecida) una artífice incansable de la búsqueda reconstructora de la verdad y guardiana de la memoria, hasta que finalmente hoy se sabe acerca del lugar donde fueron enterrados clandestinamente los restos de su hermano. Otras verdades harán falta para que exista justicia. Otras justicias deberán actuar para completar las verdades. Otras memorias deberán ejercitarse para no olvidar.


En recuerdo de su familia cercenada y de su madre luchadora , reproduzco, una de las denuncias, que Lidia Amalia Salvatori de Medrano , realiza, un 7 de Setiembre de 1979:

“ Que el día 24 de noviembre de 1976; siendo aproximadamente las 6,30 de la mañana, fuerzas conjuntas del ejército y policía en número de 20 más o menos, la mayoría con uniformes verdes, en autos y camiones, penetraron en casas linderas al domicilio de mi hijo HUGO JOSE MEDRANO, Libreta de Enrolamiento N 8.353.816, argentino, nacido el 1/6/47, quien conjuntamente con su esposa ELBA NIDIA VIDELA, Libreta Cívia N 5.780.378, argentina, nacida el 15/7/48 y una pequeña hija de ambos de 9 meses de edad, en ese entonces la habitaba, sita en Diagnonal 76 N 723 de esta ciudad de La Plata. Las fuerzas mencionadas, mediante megáfonos que fueron oídos por casi todo el vecindario, se dirigieron a mis hijos, intimándolos a salir y no ofrecer resistencia; los que acatando la orden salieron acompañados de uniformados que habían entrado por la puerta frontal de la casa, siendo introducidos en automóviles en el que partieron con rumbo desconocido, pero, según informaciones obtenidas, varias personas quedaron en el interior de la casa. Mi nieta, de 9 meses de edad, de nombre Paula, fue dejada en el ínterin, a cargo de unos vecinos linderos; la familia Conti, con domicilio en Diagonal 76 sin número, entre calles 21 y 46. Dos días después, el 26/11/76, la beba me fue restituida por dicha famita, previa exposición de lo ocurrido en la seccional 4ta de la Policía de esta ciudad, donde quedó constancia. Mis gestiones hasta el momento han sido: denuncia en el Ministerio del Interior donde he solicitado varias entrevistas todas con resultado negativo, recorrida por Regimientos, Comisarías, Unidades Carcelarias, sin conseguir ninguna información sobre su paradero, para que se los juzgue según las leyes si es que algún delito han cometido”

Marta Medrano me atendió personalmente en su domicilio, con motivo de la realización de una entrevista de varias horas para mi libro: “Cañon Krupp: La dictadura en Tres Lomas. 1976/83”, entrevista que construyó el núcleo principal de un capítulo dedicado a su hermano, llamado : “Hugo José Medrano: Charcas, arenas movedizas y trampas escondidas”.

Allí, con mucha generosidad compartió documentación, fotografías, denuncias efectuadas, trámites realizados e infinidad de anécdotas de hermanos que se amaban.
Hoy decido hacer público el mail de Marta, creo que vale la pena, porque muestra claramente las "puntadas finales" del Terrorismo de Estado para aquellos militantes desaparecidos durante la dictadura.

Y le pido disculpas por hacerlo de esta forma, intentando en el final de la nota, recordar al Hugo vivo, aquel que ante la flaqueza propia o ajena sostenía: “No te caigas. Hay mucho por hacer. Mucha gente nos necesita. Hay que encontrar las formas” o su frase predilecta, la del revolucionario checoslovaco que resistió la ocupación nazi, Julios Fucik: “Hemos vivido para la alegría; por la alegría hemos ido al combate y por ella moriremos. Que la tristeza jamás vaya unida a nuestro nombre”

Un beso Marta.