GARCIA: UN PROFUNDO EGOISMO

¿Es posible que se sostenga que es innecesaria una campaña solidaria? ¿Qué “solidaridad” moviliza tamaña afirmación? ¿Cómo es que un concejal del oficialismo se permite “sugerir” el norte de la actividad de un Centro Preventivo Asistencial que trabaja muy bien en todas sus esferas de acción pautadas por la Provincia de Buenos Aires?

La cuestión se instala en Tres Lomas, desde que el Concejal García de la UCR consideró a través de una carta dirigida a los medios de comunicación locales, que la campaña solidaria “El CPA te abriga” es innecesaria.

Lo dice así: “Creo que este esfuerzo-que no deja de ser loable-es innecesario, porque en nuestra comunidad los más necesitados están amparados.” Y agrega al respecto: “Desde el municipio se ha expresado que siempre habrá apoyo para quienes más lo necesiten y es por ello que existe el Sistema de Salud y que nunca falta una garrafa, la bolsa de alimentos, la frazada o el colchon”.

La campaña del CPA tiene como objetivo ayudar con ropa de abrigo a las familias mas necesitadas, especialmente en esta época del año donde el frío se hace sentir. En cualquier lugar del mundo esto es bienvenido, pero parece que aquí en Tres Lomas no, que la solidaridad tiene dueños, que solo algunos pueden invocarla (habría que ver que contraprestación se espera para juzgarla en toda su dimensión).

El CPA organizó la campaña y orientó con día y horarios a los vecinos que quisieran donar ropa de abrigo en condiciones de ser usada, dando a conocer además la sede donde se clasificará la ropa y cómo será repartida por los integrantes del Voluntariado que trabaja con la entidad.

Cabe recordar, que los CPA de la Provincia de Buenos Aires, historicamente trabajan en tareas preventivas, asistenciales y de promoción de la salud, convirtiendose en un polo de trabajo socio-comunitario, con profesionales aptos para desarrollar la actividad.

Solidaridad es la acción de ayudar y poner tus capacidades al servicio de los demás, sin distinción de credo, sexo, raza, nacionalidad o afiliación política. La finalidad sólo puede ser el ser humano necesitado. Así debiera ser concebida por todos y fundamentalmente fomentada como forma de fortalecimiento del dañado tejido social que ningún paternalismo local podrá restaurar por sí solo en su afán excluyente.

Eduardo Galeano, el genial autor del clásico “Las venas abiertas de América Latina” la define así:” La caridad es humillante porque se ejerce verticalmente y desde arriba; la solidaridad es horizontal e implica respetuo mutuo.” ¿Qué practica el gobierno de García, si tiene estas ideas? ¿Es caridad partidocrática o solidaridad verdadera?

Pues bien, el Concejal García, en representación de todo su gobierno (porque nadie ha salido a diferenciarse de sus apreciaciones) considera que lo que se hace desde la municipalidad es suficiente, que no hace falta más, que el resto es innecesario.

¿Qué hacer entonces con las decenas de familias que reciben solidariamente la bolsa de alimentos que el Partido Justicialista de Tres Lomas gestiona en la provincia de Buenos Aires? ¿Qué hacer con todas las acciones solidarias grupales que muchas instituciones que no son el municipio ni las iglesias, desarrollan silenciosamente? ¿Cómo sostener-desde esta concepción miope y pijotera-las solidaridades individuales que muchos treslomenses desarrollan? ¿Cuál es el lugar reservado para la solidaridad de los más pobres? ¿No tienen los pobres derecho a ser solidarios?

¿También es “innecesario” que ellos la practiquen? ¿Es posible que el análisis partidocrático nuble de tal forma la mente del concejal? ¿Qué mandado horrible lo obligaron a hacer? ¿Piensa eso realmente o como tomando aceite de ricino, declaró el vómito entregado con arcadas incluidas?

La solidaridad no tiene dueños y jamás será innecesaria, al contrario, es una de las formas como se manifiesta la ternura de los pueblos, de su gente común.

En realidad, la verdadera solidariad es la que no se queda en el asistencialismo, sino aquella que impulsa los vientos de cambio verdaderos, para que cada individuo se desarrolle por sí mismo, sin hacerle sentir que “está siendo ayudado”, sin agradecimientos en los diarios, con el norte de la verdadera dignidad del ser humano.

Ser solidario implica afecto por el otro, no conveniencia, fidelidad a la necesidad sin especulaciones, significa comprensión al maltratado y apoyo al perseguido. Ser solidario verdaderamente significa apostar por causas perdidas pero justas.
¿De que habla el gobierno de García?

No habla del sentimiento, no habla de ver las cosas con otros ojos, de mirar de otra manera a nuestro alrededor, habla desde la negación del otro que quiere ayudar. “Solo nosotros” vocifera en su coloquial carta. Y pese a que sostiene que la “actitud es loable” (significa alabable), al calificarla de “innecesaria” el doble discurso se lo traga.

García habla de una apropiación municipal de esta idea, dice que “ya está”, que los que quieren ayudar-de cualquier forma que sea- pierden el tiempo, habla de desmovilización, habla de parálisis social, de convertirnos en espectadores pero jamás en protagonistas.

En definitiva, habla de un profundo egoísmo.

Habla de antisolidaridad.