martes, 28 de mayo de 2013

GOBIERNOS FUERTES NO SON NAZISMO




¿Qué entendìa el Partido Comunista por “fascismo” o “nacionalfascista” , cuando tildaba a Yrigoyen de serlo?

Creìa que un gobierno pasaba a serlo cuando perseguìa al comunismo, siguiendo las directivas del Partido Comunista central en Rusia. Y la Semana Tràgica en los Talleres Vassena o la muerte de la peonada Patagónica no fueron vistas con lentes nacionales, sino prestados. 

Nunca pudieron ver la diferencia entre un gobierno como el de Yrigoyen (posición mucho mas marcada con Peròn mas tarde) que intentaban defenderse de las presiones del imperialismo y tambièn de las presiones locales  de la oligarquía siempre reaccionaria.

Esa izquierda anquilosada, alejada del propio análisis marxista, cuando veía un gobierno fuerte y popular, no dudaban en vincularlo con el fascismo en el caso de  Yrigoyen y con el nazismo años mas tarde con Peròn.

Y lo publicado en estos dìas por  el diario de los Mitre, no tiene como destinatario a esta izquierda vetusta (Carriò es un cachivache) , sino que apunta a la derecha liberal y a una porción de la clase media que maquillada de legalista , aceptò sin problemas a todos los gobiernos de facto, pero jamàs a uno que consolidara su poder en las urnas, gobiernos “fuertes”, estados "fuertes" : Yrigoyen y Peròn. La continuidad està dada y por eso el pasado sigue siendo hoy.

El Partido Comunista, en el caso de don Hipòlito Irigoyen, el “personalista”, estuvo de acuerdo con el golpe de estado de 1930. La oligarquía, pensando con el bolsillo los aplaudìa. Hoy le salvan el pellejo a Elisa.

Es que Yrigoyen, pese a las contradicciones de un gobierno que pecó por demasiado legalista, habìa achicado de 140.000 a 30.000 hectàreas las tierras que tenìan las empresas petroleras privadas pasàndolas a  manos del estado. Esto solo volvìa locos a los Imperios, clavada la astilla (YPF) en el centro mismo de los monopolios petroleros.

Paradojicamente, Yrigoyen  no terminò de cuestionar la legalidad burguesa, pero cada vez que intentaba hacerlo, los tìtulos y discursos de diarios y opositores no se hacìan esperar: “Yrigoyen marcha hacia la dictadura”.

Bastaba ese caudillo que no discurseaba, ya anciano, con una ideología difusa, pero que encarnò una democracia integradora que devenía a ojos vistas en un proyecto nacional,  que atendìa en sus despachos a todos por igual y que les ganaba las elecciones  cada vez por mas votos , para que de la cloaca de sus bolsillos insaciable lo llamaran “fascista”. ¿Se imaginan con Peròn?. 

Por eso Cristina, vas por buen camino. El enemigo històrico del pueblo Argentino està usando los mismos argumentos que utilizaron para derrocar a los dos grandes movimientos populares de nuestro paìs.

Y por ùltimo, si algo de fascismo y nazismo se ve en las pràcticas actuales de nuestra naciòn, es el intento de gobernar a través de las corporaciones, sin lugar para las representatividades ganadas legítimamente en elecciones democràticas y materializadas en leyes que las primeras no estàn dispuestas a cumplir.



2 comentarios:

Tilo, 72 años dijo...

El turraje excluyente vernáculo es camaleónico y esperpéntico. Según ellos, nuestros gobiernos populistas, populares de verdad, tienen enquistado el huevo del nazismo, no es cierto?

Pues veamos un poquito de historia no tan lejana, precisamente de fines de la década infame:

Tras el ataque de Alemania provocando la anexión de Austria al Tercer Reich el 12 de marzo de 1938, las reacciones en Argentina no se hicieron esperar. Los partidarios del nazismo (entre los que había alemanes y austríacos argentinos) identificados como el "Landesgruppe" se reunieron en el Club Alemán de Buenos Aires, donde convocaron a 3.500 personas, con la intención de sumar a los simpatizantes del Nacional Socialismo vernáculo al plebiscito organizado por Hitler para respaldar la anexión austríaca al Tercer Reich. Aunque no lo lograron, sorprendieron al mundo con un impresionante acto celebrado en el Luna Park de Buenos Aires, uno de los centros de reunión más importantes de la Argentina.
El hecho tuvo lugar el 10 de abril de 1938, con la asistencia de 20.000 personas y un gran despliegue de banderas argentinas y emblemas del Tercer Reich con esvásticas y estandartes, en el que fue el MAYOR ACTO celebrado por el nazismo fuera de las fronteras de Alemania en toda su historia.

Al acto asistieron el gobernador de la Pcia. de Buenos Aires Manuel A. Fresco y su ministro de gobierno, ROBERTO J. NOBLE, que en 1945 sería el fundador del Diario "Clarín". Fresco y Noble eran notables simpatizantes del nazismo y de las potencias que conformaban el Eje y entre sus más destacadas acciones de gobierno se destaca la clausura en 1937 de las escuelas obreras judías existentes a lo largo y a lo ancho de la provincia de Buenos Aires. Por otro lado, tanto Fresco como Noble eran quienes más apoyaban a los grupos de choque fascistas que acechaban en la Capital en barrios de alta concentración judía.

La más que centenaria "doctrina de inmundicia" también subrayó el término JUDIO al referirse a algunos funcionarios del gobierno popular como Axel Kicillof y Héctor Timerman.

Dan asco y vergüenza, nada más.

Saludos

grillito dijo...

Jose Ortega y Gasset le dijo a los argentinos en 1939 "Dejense de cuestionesprevias personales, de suspicacias, DE NARCISISMOS. No presumen uds. el brinco magnifico que daria este pais el dia que susu hombres se resuelvan de una vez,bravamente, a abrirse el pecho a las cosas, a ocuparse y preocuparse de ellas directamente y sin mas..." LLEGARA ALGUN DIA ELINSTANTEDE DAR EL MAGNIFICO BRINCO?